Muchas personas suelen tener miedo al momento de expresarse delante de varias personas. La voz temblorosa, transpiración, trabas verbales y hasta movimientos inapropiados son algunos de los defectos que sufre alguien incapaz de dirigirse a los demás con naturalidad.
Los nervios de hablar en público son más frecuentes de lo que crees, por lo que a continuación presentamos 10 consejos para aprender a hablar de manera fluida y profesional y poco a poco perder el temor que surge cuando toca dar un discurso.
1. Domina tu material
Si vas a exponer algo, o quieres brindar tu punto de vista sobre un determinado tema, recuerda que debes estar muy informado sobre el mismo. Este dominio te dará mayor seguridad cuando abordes tus ideas y sabrás responder a las preguntas si es que te llegan. Recuerda que no es necesario exponer toda la información que sepas, pues es más un respaldo que un examen.
En caso de que tengas que hablar de un tema personal, una experiencia o alguna anécdota, una excelente idea es recorrir al humor. Abre con algún chiste, haz participar a tu audiencia para que se familiaricen más con tu punto de vista. Así el momento se volverá más divertido, sobre todo para ti.
2. La práctica hace al maestro
La clave para toda intervención verbal es la práctica. Párate delante un espejo y utiliza un micrófono o algo que lo represente. De esta forma podrás identificar qué momento conviene hacer pausas, cómo controlar tu postura y desde luego, identificar las falencias que tengas. Algo extra que puedes controlar si lo necesitas es el tiempo de tu discurso.
3. Conoce a tu audiencia
Si bien no siempre hay la suerte de que tu público esté compuesto por familiares y amigos, es posible conocer a tu audiencia incluso cuando sean extraños. Una forma es saludarlas conforme vayan llegando. Preséntate y pregunta algo que te ayude a hacer una idea de tu público.
Esto hará que te sientas algo más familiarizado con ellos y los nervios serán menores. Además, contarás con indicios de lo que quieren esas personas, de manera que puedes abordar tu discurso de manera que llame directamente su atención.
4. Observa tu entorno
Siempre es bueno llegar un poco antes de tu discurso o presentación para conocer el lugar donde hablarás en público. Aprovecha para probar el micrófono y los apoyos visuales, si los tienes. Con esto tendrás la certeza de que todos te escucharán y observarán, y será una preocupación menos al momento de hablar.
5. Relájate
Respira profundo, mira a tu audiencia como lo que son, simples seres humanos, y sonríe. Cuenta hasta tres en tu mente para medir tus pausas. Sacude levemente tus brazos antes de comenzar y hablar y flexiona los dedos de tus pies si necesitas descargar un poco la ansiedad. La ventaja de este último movimiento es que aunque estés en pleno discurso, nadie se dará cuenta.
6. Visualiza tu éxito
Imaginarte a ti mismo hablanco con confianza, elocuencia y fluidez, es lo ideal para hablar en público. Con esto podrás ganar confianza y divertirte más con la experiencia. Si estás enfocado en que lo haces bien, lo harás bien, y esto se verá reflejado en tu audiencia.
7. Recuerda que tu audiencia no es mala
Muchas personas tienen la paranoia de que los demás están constantemente a la búsqueda de alguna excusa para burlarse o criticar. Olvida esto al momento de dar tu discurso y piensa que ellos están delante de ti porque realmente tienen interés en tu tema. Así que adelante, expláyate de tu tema y permite que ellos disfruten también del mismo.
8. No te disculpes por estar nervioso
Bajo ninguna circunstancia afirmes estar nervioso, porque esto le restará confianza al público y comenzarán a notar todas tus falencias. Así como en el punto seis, recuerda mentalizarte que estás seguro de lo que vas a decir y verás que tu audiencia se convencerá de que sabes de lo que estás hablando.
9. Ama tu tema
Procura apasionarte lo más que puedas por el tema que decidas abordar, aunque sea de manera obligatoria. Si el público nota que disfrutas hablando de eso, le llamará la atención y querrá saber más. Así no se fijarán tanto en tus defectos, sino en tu mensaje y pasión por el mismo.
10. Aprende de la experiencia
Ciertamente no darás tu mejor discurso a la primera, es por eso que debes observar lo mejor posible cuando lo hagas e identifiques qué defectos tuviste y en qué tendrías que mejorar. Para esto también sirve la práctica, pero al final no habrá mejor oportunidad para identificar tus errores que en un auténtico discurso con otras personas. Por eso hazlo, practica y detecta tu método para afinarlo.// Los Tiempos
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